de mantenimiento y compras, costos de capital, fuentes de capital,
sistemas presupuestarios. control de costos y otras técnicas.
d) Factores externos: La productividad determina en gran medida el ingreso
real, la inflación, la competitividad y el bienestar de las personas, razón
por la cual las organizaciones se esfuerzan por descubrir las verdaderas
razones del crecimiento o la disminución de la productividad. Entre estos
factores se encuentran los siguientes: Ajustes estructurales. Los cambios
estructurales en la sociedad a menudo influyen en la productividad
nacional y empresarial, independientemente de la dirección que tomen las
empresas. Pero en el largo plazo, los cambios en la productividad tienden
a modificar esta estructura. cambios económicos. La transferencia de
empleos de la agricultura a la manufactura; el paso de las industrias
manufactureras a las de servicios; y, por otro lado, variaciones en la
composición del capital, en el impacto estructural de las actividades de
investigación, desarrollo y tecnología, en las economías de escala y en la
competitividad industrial. Cambios demográficos y sociales. En este
sentido, las tasas de natalidad y mortalidad destacan porque, en el largo
plazo, suelen tener repercusiones en el mercado laboral, en la integración
de las mujeres al mercado laboral y en los ingresos que reciben. , edad
de jubilación y valores culturales. y actitudes. Recursos naturales.
Incluyen trabajo, capacidad técnica, educación, formación profesional,
salud, actitudes, motivaciones y superación profesional; la tierra y su
grado de erosión, la contaminación del suelo, la disponibilidad de tierra, la
energía y su oferta, las materias primas y sus precios, así como su
abundancia. Administración pública e infraestructura. Incluye leyes,
regulaciones o prácticas institucionales implementadas que tienen un
impacto directo en la productividad.
MYPES: Las MYPES son micro y pequeñas empresas agrupadas en unidades
de negocio que ofrecen productos o servicios y se presentan como una
alternativa de empleo y desarrollo. La microempresa tiene hasta 10 trabajadores
con una facturación máxima de hasta 150 UIT, mientras que la mediana empresa
tiene hasta 100 trabajadores con una facturación máxima de hasta 1.700 UIT.